martes, 9 de abril de 2024

Ser o parecer. Tribulaciones de la dirigencia política.

La imposibilidad de la clase dominante de construir un orden político que la legitime como clase dirigente la lleva a desplegar y proponer mecanismos alternativos, entiéndanse esto como democracias restrictivas, fraudulentas, condicionadas o combinaciones de ellas.

Esta clase antes no dudaba en pagar el costo de sostener dictaduras con distintos niveles de violencia. Desde los 80, cuando ese costo se transformó en inviable, las élites aceptan la acción de los modelos democráticos siempre que los dirigentes de la política garanticen el mantenimiento del statu quo que no cuestiona los modelos de generación de riqueza y menos aún los modos de apropiación de la misma.

Las pautas de distribución regresivas deben mantenerse, aunque no favorezcan el crecimiento general, ya que esa regresión es la base ideológica que sostiene las élites. El poder, ejercido en el acto de decidir sobre la forma de distribución, es la justificación de su existencia en tanto clase.

Ocasionalmente la dirigencia política surgida como gobierno elegido dentro del sistema pretende modificar estas pautas. Su propia existencia debe justificarse frente a la sociedad que pretende representar y entonces intenta alterar ese mecanismo, ya sea modificando los esquemas de distribución del ingreso o cuestionando los modelos de generación de la riqueza del país.

Cuando así sucede las élites rompen las articulaciones que arman el sistema de dominio y control social restringido y despliegan con otras fracciones de la dirigencia (judicial, mediática, internacional) nuevas relaciones que permiten socavar la legitimidad de esos gobiernos, accionando contra y persiguiendo a quienes les disputan el poder, construyendo relatos sobre la anticorrupción, el autoritarismo y el despilfarro de recursos.

Esos relatos apuestan a la polarización donde en la violencia de la discusión se obtura cualquier pensamiento crítico y sólo se escuchan las voces más potentes que terminan “convenciendo” por ser el único discurso imperante y a la vez el más fuerte en volumen. Los problemas y fallas de la dirigencia política son permeados al sistema democrático por contigüidad, permitiendo que sea cuestionado per sé.

El compromiso de la clase dominante con la democracia es restringido e instrumental. Sólo la respaldan si pueden orientar su despliegue y el accionar del Estado en su propio beneficio (tanto el económico como el mantenimiento de su poder) y no dudan en sabotearla si esos ejes se ven cuestionados.

Eso coloca a los gobiernos democráticos que pretenden representar al conjunto del cuerpo social en una situación de obligación de aumentar su base social de poder, ya que cualquier posibilidad de apoyarse en un solo actor social por mayoritario que sea, lo único que logra es provocar una grieta que es luego usada en su contra.

Esta obligación es permanente y va más allá de la eficiencia, transparencia y pluralidad desplegadas con mayor o menor efectividad en uno o varios gobiernos.

No sólo parecer: ser.

sábado, 17 de octubre de 2020

Clicks perdidos

 Y un día despunté el vicio de volver a escribir.

Sobre redes y política , como visitante en otra página:

Con Cristina no alcanza, sin Cristina no se puede.

Esta definición política, que habilitó la gimnasia de construcción de alianza y acuerdos del Frente de Todos que llevaron a Alberto Fernández a la presidencia, puede pensarse en otra clave:

Con los medios no alcanza y sin los medios no se puede.


El resto , acá:

https://revistaperro.wordpress.com/2020/10/07/clicks-perdidos/

martes, 17 de diciembre de 2019

Sin consenso

Mucho ha circulado en todos lados sobre la cuestión del consenso.
Dijeron los neoliberales que los populistas no estaban dispuestos al consenso.
Dijeron que la discusión no habilita al consenso.
Dijeron que sin consenso no se llegaba a buen puerto.
¿Qué es el consenso ?

¿Es la conformidad o el acuerdo ?
¿Es discutir y llegar a un acuerdo o es estar conforme  como adhesión a un contrato cuyas cláusulas no pueden discutirse ?
¿Quién organiza y articula el diálogo y la discusión para llegar a ese acuerdo?
¿Bajo qué reglas se discute, la instalada por los medios o las parlamentarias?

¿Es obligatorio consensuar?

Decía Casullo que para pensar en forma diferente había que cambiar las palabras y los ejes , la mecánica misma del dispositivo de razonamiento, porque las palabras, las categorías y la dinámica discursiva son las de las clases que conducen la hegemonía.

La discusión sobre los derechos de exportación, mal llamados retenciones, abrió nuevamente el escenario de la falta de consenso.
No nos consultaron, sostienen los representantes del sector del capital decicado al negocio agrofinanciero.

¿Porqué deberían consultarlo un gobierno que gana porque dice y promete que hará justamente lo contrario de lo que hizo perder la elección al gobierno neoliberal ?

El impacto en las redes y en los medios de las primeras medidas, del primer golpe de timón que corrige el rumbo hecho por este gobierno nos lleva a preguntarnos si acaso la estrategia de comunicación formó parte del criterio de diseño en la política pública a desplegar, o no.

Las condiciones históricas no son las mismas que en 2008, hace once años la discusión fue novedosa y brutal entre otras cosas porque un sector concentrado del capital pudo conducir su  discurso vinculándose con La Patria, El Ser Nacional, el Campo y la baguala más todo el paquete de sentidos que viene asociado.
Nadie discute la importancia en la generación de divisas ( no así de trabajo en blanco y mano de obra) del sector,  muy importantes para el giro de la economía industrial local, es un tema para economistas y no es lo que me interesa ver a mi acá.

¿Que pasa con la sociedad civil ?
¿Cómo toma hoy, once años después ese enfrentamiento ?

Los resultados de la aplicación del paquete ideológico neoliberal están a la vista.
El período 2015-2019 sólo habla de grandes fracasos para todos los sectores económicos y sociales que no estén en el sector financiero, energía, comunicaciones y agro-negocios.
Seguramente es demasiado temprano  a una semana o más de la maniobra urgente con el timón, para contar con estudios de campo que puedan inferir ( y no medir , porque no es ciencia exacta) que es lo que le pasa a la población con las medidas del gobierno y que piensa sobre la responsabilidad social del sector que salió a vociferar contra ellas.
En relación al fracaso general del modelo neoliberal ya se expresó en las elecciones.

Sin esa información es ocioso pensar en un diseño comunicacional de nada, pero tampoco puede justificar el no plantearse investigar.

Que existe una vocación de articulación novedosa entre el Estado, los agentes y los sujetos es probablemente el primer diferencial de calidad de esta gestión sobre el segundo período de CFK, cerrado sobre sí mismo y diseñando política pública de escritorio que muchas veces ignoraba a los sectores intermedios.
A una semana tenemos reuniones con los gobernadores y con los sectores políticos  que puedan garantizar alguna efectividad en las medidas.
Los agentes económicos implicados también son recibidos, después, para dialogar desde una posición de poder porque en definitiva alguien tiene que mostrar quién maneja la botonera.

Pero no es consenso.
Es discusión, tira y afloje de tensiones entre una sociedad que votó un proyecto de distribución de ingreso y los que se apropian de la plusvalía, que existe y no es mala palabra.

Nuestra sociedad, a diferencia de otras, eligió un modelo y resistió un mal resultado apretando los dientes, porque había una salida política.

Uno espera , cree - y aportará para que se haga- que se construirán acuerdos  de a poco, sabiendo incluso que todo acuerdo es contingente y puede ser denunciado.

El consenso es la paz de los cementerios, que están llenos de muertos.




lunes, 26 de agosto de 2019

Sordos Ruidos . Política, ciencia y tecnología.

5000 es el número.

El sábado 3 de agosto , un encuentro fogoneado por el Frente de Todos reunió a 5000 personas discutiendo planes y políticas públicas sobre Ciencia y Tecnología en más de 50 comisiones y con más de 200 expositores.


El Frente denominó y citó a esa reunión como el Encuentro Nacional de Equipos Técnicos.


Lo primero que interesa rescatar es la potencia del número.  Es evidente que no hay otra fuerza política capaz de reunir ese volumen de personas , con formación superior, puestas a pensar y discutir aspectos y propuestas para vincular a la Ciencia y a la Técnica como tractores específicos en un proyecto de desarrollo nacional.

En palabras de Fernando Peirano, responsable de CyT del Frente de Todos acá , "Argentina ha sabido conformar un sistema de Ciencia, pero cuando hablo de sistema no me refiero a una estructura gubernamental, sino a tres características o capacidades. La primera es la posibilidad de formar recursos humanos, (...) La segunda característica es una articulación de los elementos y la tercera es que haya una orientación política que le asigne misiones a ese sistema."
Peirano destaca la intención de formar también un sistema tecnológico que tenga " capacidad también de formación de recursos humanos, capacidad de articular los elementos con los que contamos, como son los proyectos nucleares, satelitales, radares, Conectar Igualdad. Esto marca una agenda de tareas a hacer: hay que restaurar lo que teníamos al 2015 y proyectarnos más allá, reconocer los límites estructurales que habíamos alcanzado por la recuperación y puesta en valor de la Ciencia Argentina. "
Esta agenda se elabora pensando al Estado como actor principal del programa, porque su rol de planificador, orientador de recursos y protagonista a nivel de los institutos de ciencia y tecnología del Estado no puede ser desestimado.

Se piensan así por ejemplo desde el rol de poder de compra del Estado, definiendo no solamente los bienes sino también el perfil de las necesidades que amerita un bien a desarrollar, lo que potencia el uso del aparato científico y tecnológico articulado con un entramado productivo  nacional, federal y pyme. El sistema de radares meteorológicos o los satélites son el ejemplo del caso.

Se define qué es lo que se necesita, y eso justifica la potencia de un entramado de CyT para desplegar el cómo se resuelve  esa necesidad.

Este conjunto de técnicos, académicos , institutos de investigación estatales, desplegados en toda la nación no deja de ser un colectivo heterogéneo, diverso pero con un saber y un propósito que los vincula.

¿Alcanza con eso?
¿Es suficiente la preocupación de un sector de la academia por el uso del cluster de CyT como un vector más en un programa de desarrollo?
¿Que tiene que decir nuestra sociedad sobre ésto? 
¿Se debe dejar el despliegue de CyT a los científicos y tecnólogos o la sociedad tiene que participar de alguna manera en el compromiso político-ideológico que implica una política activa de CyT ?
Si la respuesta es por la afirmativa, el camino a recorrer desde el punto de vista comunicacional es arduo y complejo.

Podemos decir que la “esfera pública” se define a partir de un conjunto de personas privadas que se reúnen para debatir sobre los asuntos públicos. Lo “común” entonces se construye en el ámbito de lo público como resultado de una acción colectiva. Esta acción es el resultado de un intercambio que es comunicacional y que se manifiesta en el espacio o el territorio de la cultura.


La comunicación entonces, es imprescindible en el proceso de desarrollo que significa la creación de políticas públicas que resultan ser el espacio natural de configuración e implementación de los derechos sociales de los ciudadanos.

Puede convenirse en que toda política pública es manifestación y puesta en práctica de una concepción sobre la sociedad y sobre el modelo de desarrollo que se quiere alcanzar. 
El espacio de tales políticas es necesariamente un ámbito de diálogo, de intercambio, de debate y también de lucha política.
La importancia de la participación de ésta sociedad civil reside en que ella provee de los agentes implicados por la situación con sus conocimientos y necesidades específicos y que en los procesos de gestión e implementación las políticas públicas ganan legitimidad a partir de una mayor participación en su diseño y de mejores acuerdos de partida. 

En este mes sanmartiniano que termina, tras los muros, los corceles y el acero son ensillados y afilados por los pueblos.

viernes, 26 de julio de 2019

Veremos si seguimos

Y de repente , luego de muchos meses de callado volví a visitar viejos divagues.

Veremos